- 14/02/2024
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Entre evidencia e incertidumbre
Por María Eugenia Gutiérrez (*) –
Considerar la incertidumbre en la educación es empezar a sentar bases sensatas y lógicas que concreten las expectativas que la comunidad educativa sostiene y poder cumplirlas
Nos encontramos con una especie de añoranza, que ubica a la incertidumbre como una luz con grandes interrogantes, que nos hace pensar en otros tiempos de Educación, con discusiones de fondo, sobre sus fines, las nuevas realidades, las profundas desigualdades, la prioridad de las políticas educativas de equidad, las apariencias, entre otras. Aquí se descubre la premura en el trabajo que dé vigor a sociedades justas y equitativas, teniendo como norte el conocimiento, la solidaridad, la empatía, el reconocimiento a las diferencias, sabiendo que sin educación no hay trabajo ni progreso personal o social.
Lagunas de formación y problemas que se repiten y acumulan en los alumnos con mayor vulnerabilidad generan graves daños en la adquisición y manejo de la lectura, escritura y pensamiento matemático y en el completamiento de cada año de estudios, necesitando acciones concretas y paralelas que contribuyan a sostener las trayectorias escolares con sus contextos y necesidades específicas.
Se vuelve absolutamente necesaria la integración de las familias, estrechando lazos en el ámbito escolar. Las continuas o discontinuas intenciones de reformas, mejoras o cambios nos muestran la relevancia que tienen los conceptos de Calidad y Equidad en Educación, constituyendo el desarrollo y el crecimiento del principio de igualdad de oportunidades.
La deconstrucción de nuestro Sistema Educativo despejaría incertidumbres, dándole lugar a la participación, a la creatividad, instrumentando nuevos y probados modelos, con el compromiso de pensar y acordar desde ahora el futuro que queremos para nuestros estudiantes en tiempos donde debiera primar el reconocimiento a la diferencia, al pensamiento divergente y a la creatividad.
El abanico de temas abarca cuestiones generales y políticas educativas nacionales, también políticas Provinciales contextualizadas a realidad de los datos o la información propia que debiera guiar el horizonte de las decisiones, dotando de sentido y legitimidad a las acciones de los Estados orientadas al cumplimiento efectivo.
En los Documentos reciente de UNESCO por la Educación, la caracterización de la política educativa se abordará desde tres dimensiones haciendo foco en: 1) currículo y modelos de gestión institucional; 2) docentes; 3) infraestructura, tecnología y equipamiento; 4) transferencias de bienes y recursos financieros con el fin de fortalecer el sostenimiento de las trayectorias escolares.
Será posible pensarlo e implementarlo en un momento con mucha incertidumbre y pocas certezas no olvidemos que la educación transforma vidas!
Fuente: Giroux, Henry, Pablo Rivera-Vargas y Ezequiel Passeron (2020), “Pedagogía pandémica. Reproducción funcional o educación antihegemónica”, Revista Internacional de Educación para la Justicia Social, vol. 9. UNESCO, 2023.
(*) Docente, exsecretaria de Educación
Fuente: Publicado en Nuevo Mundo, edición 865 del 13 de febrero de 2024