Vicente Serrano, un sanjuanino de paseo por Israel

El dueño de Frigorífico Avícola Soles contó su experiencia de estar en un país en el que la gente vive en constante peligro de guerra.

Viajar a un país en el que hay constantes peligros por la guerra y la amenaza de misiles que pueden caer en cualquier momento fue el relato de Vicente Serrano, propietario de Frigorífico Avícola Soles. El sanjuanino está en Israel, visitando a familiares que viven en aquel país y en CNN Radio contó su experiencia.

«La situación está complicada tanto en el sur como en el norte. En el sur, en la zona de Gaza, obviamente la situación se conoce, y en el norte se está incrementando un poquito la acción bélica con Hezbollah y toda la shihad islámica apoyada por Irán», contó Serrano, quien tiene una hermana y sobrinos que viven en Israel.

Contó que por estos días no hay mucha actividad bélica, «pero suenan alarmas de bombas o misiles que ocurren diariamente». Contó el caso del lunes pasado cuando viajaba con una sobrina por una ruta «y de repente se bajó el volumen de la radio y empezaron a sonar las sirenas. Así que, ante una eventualidad de esa envergadura, tenés que detener el vehículo en la ruta, salir inmediatamente y tirarte boca abajo a un costado de la ruta. Y eso fue lo que hicimos realmente, hasta que dejaron de sonar las sirenas».

Dijo, que a pesar del incidente, no se asustó. «Para nada, inclusive cuando estábamos en el piso nos sacamos una foto con mi sobrina», dijo.

A pesar de esos problemas, Serrano dijo que la gente está acostumbrada a vivir en medio de esos peligros. Agregó que «lo naturalizás de alguna manera, pero es una situación dramática, difícil. Ojalá que no tuvieran que estar pasando por esta realidad».

En medio de todos los problemas que viven los israelíes, destacó el alto nivel de patriotismo que tienen. «El nivel de nacionalismo que existe aquí en este país sólo lo tienen pocos países del mundo, excepto, si contás con la mano, a los Estados Unidos». Por ejemplo contó todos los vehículos, las camionetas, los autos, las viviendas, las calles están embanderadas. «Es algo impresionante el grado de nacionalismo, de defensa de sus ideas», dijo.

Serrano también relató que, por ejemplo, salir a comer es muy caro. Y con lo que un día pagaron por tres hamburguesas, «en San Juan comerían 12».