Niños fuera del Sistema Educativo, una exclusión de derechos

Por María Eugenia Gutiérrez (*) –  

La Educación es un Derecho y una Obligación desde el Nivel Inicial hasta el Nivel Secundario, escolarización obligatoria significa que los niños deben acudir a la escuela salvo que cuenten con un motivo válido para no hacerlo. En este contexto, los padres o tutores tienen la responsabilidad que los niños vayan a la escuela.

En el mundo, alrededor de 63 millones de adolescentes de entre 12 y 15 años están privados de su derecho a la educación, según el nuevo informe desde UNICEF junto al Instituto de Estadística de la UNESCO, denominado Subsanar la promesa incumplida de una educación para todos: Conclusiones de la iniciativa mundial sobre niños sin escolarizar. El mismo fue elaborado durante el Foro Mundial sobre la Educación, y explica que los adolescentes tienen el doble de probabilidades de estar sin escolarizar que sus compañeros más jóvenes.

Según la Ley de Educación Nacional 26.206, la obligatoriedad escolar se extiende entre los cuatro años hasta la finalización de la escuela secundaria, es decir, un promedio de edad de 17 años, en nuestro país los números encontrados nos muestran que se estima que son 500.000 alumnos a nivel nacional; por otro lado, según el último Censo Nacional, cerca de 650.000 niños y adolescentes de entre 4 y 17 años están fuera del sistema educativo. De ellos, aproximadamente medio millón son adolescentes.

Profesionales insisten en la necesidad de identificar qué provincias son las más afectadas y los números reales, ya que hay variaciones que implican niños sin acceso al Sistema Educativo. Según el crecimiento anual de la población se podría tener una aproximación, ya que el Sistema Integral de Información Digital Educativa (SinIDE), entiendo consta de un desarrollo de matrícula nominal de Educación Obligatoria en todo el país, pero a la fecha desconozco su implementación. Es notable en los últimos Operativos de Evaluación Nacionales e Internacionales, si bien la cantidad de respondientes es muy alta, el número de la cantidad de estudiantes disminuye en las aulas.

No se conoce un Plan Nacional o Provincial para identificar los niños y adolescentes en edad escolar que están fuera del Sistema, que por su naturaleza debería ser trabajado con distintas áreas de gobierno, ya que hablamos de vulnerabilidad de Derechos.

El sostenimiento de la falta de acceso al derecho a la educación está siendo muy difícil de revertir por la trama social, política y económica, entendiendo que la pobreza es la mayor barrera de acceso a la Educación.

Las estrategias que se han implementado hasta ahora, como más profesores, más clases, más libros, no resultaron suficientes para llegar a niños más desfavorecidos, por lo que las intervenciones deberían dirigirse a familias desplazadas por conflictos, niñas obligadas a quedarse en casa, niños con discapacidad, o los cientos que trabajan y los vemos en la ciudad en cada esquina.

Ellos no tienen voz, están invisibles y son demasiados, no debería existir debate sobre esta prioridad, sólo la movilización para garantizar los recursos y las acciones necesarias para el ingreso al Sistema Educativo.

Fuente: UNICEF, UNESCO, 2023


(*) Docente, exsecretaria de Educación


Fuente: Publicado en Nuevo Mundo, edición 889 del 18 de marzo de 2024