Cuando votar sí importa

Por Mariano Eiben –

«Voto obligatorio, universal y secreto» es el paradigma en el que vivimos, y tan arraigado está que nos parece extraño que en otros países sea un mero acto optativo, como en la Unión Europea. En innumerables elecciones presidenciales o de medio término el porcentaje del padrón ha ido bajando significativamente, pero podemos estar ante un cambio de época.

Los europeos son más conscientes de la importancia que tienen la Unión Europea y las próximas elecciones para renovar su Parlamento, en un contexto internacional de inestabilidad creciente. Así lo expresa el último Eurobarómetro, que detecta un aumento de la intención de voto en las elecciones antedichas y que tendrán lugar entre el 6 y el 9 de junio. Un 60% de los encuestados dice estar interesado en los comicios (11 puntos más que en 2019, fecha de las últimas elecciones), y un 71% asegura que es probable que acudan a votar (10 puntos más que antaño). En el 2019, votó el 50,7% del padrón.

El Eurobarómetro muestra también que, aunque la preocupación por la seguridad ha aumentado, en especial en los países fronterizos con Ucrania o Rusia, los votantes esperan que en campaña se hable más de políticas sociales y economía, ya que la invasión rusa sigue siendo un dolor de cabeza inflacionario.

Todos estos datos muestran tendencias al alza si se comparan con el último Eurobarómetro y con respuestas de hace cinco años, aunque eso no impide que el 86% desconozca la fecha en que se celebrarán los comicios. El 81% cree además que la importancia de las elecciones radica en el contexto internacional actual.

El portavoz del Parlamento Europeo, Jaume Duch, ha achacado el aumento de la intención de voto a una mayor «visibilidad y credibilidad» por las respuestas de la UE a las grandes crisis recientes, como la pandemia del coronavirus o la guerra en Ucrania. «Estos dos factores, más la situación geopolítica, están detrás del interés en ir a votar», ha subrayado.

Junto al interés de la gente por la seguridad están la migración, el asilo y la agricultura. Sin embargo, a la cabeza de los temas están la lucha contra la pobreza y la exclusión social, la salud pública, y el apoyo a la economía y a la creación de nuevos empleos.

No es casualidad este interés por la política social y económica, que marca la vida cotidiana de los ciudadanos, ya que las encuestas ofrecen un dato por demás revelador sobre las percepciones del nivel de vida: un 45% de los europeos asegura que ha ido a peor en los últimos cinco años, mientras que un 49% dicen que no ha cambiado y solo un 6% que ha mejorado. En España, por ejemplo, el 58% afirma que su situación económica ha empeorado. Además, el 49% cree que su nivel de vida no cambiará en los próximos cinco años, y el 32% cree que todavía puede empeorar más. El Eurobarómetro mide también la imagen que los ciudadanos tienen de la UE y sus instituciones y, por primera vez, triunfa la imagen positiva o neutra: 47% y 43%, respectivamente, frente al 17% que tiene una imagen negativa.

En suma, un 77% de los encuestados cree que su país se beneficia de pertenecer al bloque y que en un futuro próximo tendrá más importancia a nivel mundial.


Fuente: Publicado en Nuevo Mundo, edición 908 del miércoles 17 de abril de 2024